viernes, 6 de febrero de 2009

Toastmasters

Pues no, no es una tostadora. Ni siquiera hablaré del pobre gato al que se le ata la tostada con mermelada y se tira por al balcón. No. Os hablaré de un club (ellos se hacen llamar asín) dedicado a (según sus propias palabras) "to provide a mutually supportive & positive environment in which every member has the opportunity to develope communication and leadership skills, which in turn foster self-confidence and personal growth". Vamos, que suena a secta que te cagas. No andaba muy equivocado...

El caso es que una de las reuniones periódicas de los másteres de las tostadas en Seúl se dan los martes a las 8 en el quinto piso de un edificio cerca de la parada de metro de HyeHwa que es donde antiguamente se corrían las carreras de caballos.

Llegamos y para recibirnos un perfecto café americano, ese que parece el agua de limpiar la máquina. Bueno, por uno, no me va a pasar nada... (cojones qué malo...).

La gente se presenta:
- Hi man, I'm the chairman. My name’s Vernon from Canada, Vancouver- dice un rubio regordete con media barba mangotero adivina lo que tengo en el puchero.
- Hi, I'm Oscar, I'm from Korea
- Really?
- No (será idiota...), I'm from Spain, Barcelona.
- Ah, yes. Togos, Paella, bugitos, tacos...
- Ah, Canada, Calderón, fletán, je suis quebecoise...

Me miró con cara rara, afortunadamente mi amigo Chooho, que era quien me había traído junto con su novia y la amiga de ésta, me cogió del brazo y me presentó a Jacob, un tío superguapo, atlético y con una sonrisa de oreja a oreja casi perfecta. A mí un tío así se me hace difícil llamarlo Jacob, así que a partir de ahora lo llamaré Michael. Pues nada, Michael creo recordar que era americano, sobre todo por la forma de hablar que no se le entendía una mierda además de que si le ponemos pelo largo y barba podría competir con Guanaco haciéndo de "Jesus Christ buen rollito".

Jesus super buen rollito



Bueno, puntuales como un reloj parisino, empezó el gran rollazo. Primero había que presentarse y decir 4 o 5 cosas sobre uno. Había de todo, gente que contaba su vida, otras que eran breves. Hubo una coreana jovencita que no se le ocurrió decir otra cosa que se llamaba Kim no se qué y que su color preferido era el rosa (risa contenida en medio de la sala...). Sin embargo era cierto, toda la ropa, el móvil, las bambas, el páncreas, los pulmones eran rosas!!!

Me tocó a mí, y claro, tuve que decir la verdad. Había venido porque Yahoo me había prometido cerveza gratis. La gente se lo tomó a broma, pero iba totalmente en serio. Vamos que llego a saber de qué va el tema y viene su puta madre. En fin, ya empezamos mal. Nos dan los programas, ya veis que super cargados. Y nos presentan a los evaluadores. El que controla el tiempo, el que controla el tono, el número de palabras que se consideran inútiles como "so", "like", "actually", "um", "ah"... De los pedos no dijeron nada. Eso sí, no se te ocurra dar detalles de cómo te tiraste a la vecina del segundo si no te penalizan con 5000 wones (3 euretes).

Planning



Luego están los evaluadores que como su nombre indica, valoran a cada uno de los speechers por separado. A ellos también se les tiene en cuenta el tiempo y las palabras inútiles.

Planning



El primero en hablar fue un coreano acerca de la palabra del día, que era febrility debido a su similitud con February. Cada vez que se comentara a partir de ese momento ese término, debíamos golpear las mesas, es decir tocar madera y pasarlo por mail a un mínimo de 20 contactos. Si no, tendríamos mala suerte durante 7 años, se nos cruzaría una escalera negra por en medio, la chica de la que estás enamorado te dejaría por otro más feo, más tonto y con el pene más enano, y vendría un chino y te daría 193 collejas justo en la unión entre el occipital y el parietal, ahí donde se junta la roña y el sudor después de no ducharse durante una semana y media. Afortunadamente eso no existe. Alguien más feo puede, más tonto también y si me apuráis con el pene más peque, pero las 3 características juntas a la vez sólo se me ocurre una persona y ahora mismo está felizmente emparejada.


La segunda speaker fue una chica coreana que tenía que hablar sobre una película que le hubiese o hubiera maravillado. Sinceramente ni me acuerdo, tenía un tono tan marcadamente monótono que hubiera sido perfecta para un anuncio de FLEX.

A partir de aquí empezaron los speakers oficiales. Las reglas son, hablar sobre un tema cualquiera que os haya pasado recientemente evitando pasarse del tiempo establecido (cada minuto de más son 5000 wones) y evitar las palabras prohibidas.

El primero fue un tal Nam Hyeong, un coreano nacionalizado canadiense que parecía que le había lamido el pelo una vaca (aparece más abajo en el juramento, de los tres, es el de la derecha). Nos explicó una historia de lo que le había pasado a su hija que casi la atropella un autobús. Como es claro y marcan los cánones oratorios norteamericanos tenía que gesticular mucho, variar mucho el tono y sobretodo tener muy buen rollito, sonreír y entre medio soltar alguna broma chorra. No lo hizo mal, pero, qué queréis que os diga. Sonreír casi a carcajada limpia cuando dices que a tu hija casi la atropella un bus... Vamos, que sea tu suegra es comprensible, tu mujer en según qué casos, hasta pimpinela lo entendería, pero joder, tu hija...

El segundo speaker fue una chica preñada, Christine (todas las coreanos, no sé el motivo, tienen un nombre occidental, parese cer que es una moda que les da glamour. de hecho Choocho se llama Scott o Francisco, por lo que depende del momento lo llamaré Paco (tenemos ya a Paco y Quimet y acabo de meter unos paréntesis dentro de unos paréntesis (la Real Academia de la Lengua me matará (si se enteran, claro))))(no sé si los he cerrado todos…). Christine, con un acento muy english y con pausas estudiadas nos contaba su historia con las palomas y los conejos cuando fue a los USA. Vamos, un rollazo impepinable que me hizo desconectar en cuando escuche la frase "The rabbit was looking at my eyes. Sure HE (?) was thinking how nice was the weather this day". Y no, no creo que fuera el conejo el que la dejara en estado.

El tercero fue un profesional, Bob (pronunciado bab que en coreano significa arroz). Nos habló de lo cálido y recogedor que es “the old tea shop”. Con su decoración mezcla estilo Zen, con cuadritos y riachuelos. Lo relajado que te sientes y la de pensamientos que se mezclan en tu cabeza en medio de un ambiente tan propicio para la meditación (ei! yo quiero lo que fuma ese pavo!!!). La verdad es que lo hizo muy bien, cual powerpoint-man neoyorkino, pero en mi opinión le faltaba credibilidad. Se notaba demasiado que quería vender humo (el mismo que había aspirado, espero) y que no se lo creía ni él. Vamos, empezando con que intentar vendernos una simulación de woodstock, con traje, corbata y una actuación más propia de ejecutivo vampiresco, pues qué queréis que os diga. La Emi cuela, pero este no mucho...

Bueno, finalmente vinieron los evaluadores que dijeron muchas cosas pero no dijeron nada. Y se cerró el acto presentando a los nuevos miembros de la secta... digo club, de los cuales Paco era uno de ellos. Genial, les hicieron repetir una por una todas las palabras del juramento de los másteres de las tostadas. Sólo faltaba el God Bless America. Yo ya me subía por las paredes. Quería salir de todo ese ambiente filo-yankee. Necesitaba aire coreano. Por fin se acabó y nos fuimos a tomar un helado y comentar la jugada.

Juramento sofista



He estado buscando información acerca de los másteres de las tostadas en internet. No encuentro motivos para sospechar aparte esa obsesión por el buen rollito. Pero creo que les daré otra oportunidad, sobre todo si puedo mostrar otro punto de vista acerca de la comunicación oral que es ni más ni menos que comunicar algo con sentido y dejarse de chorradas (hay otro tipo de comunicación oral pero la dejare para otra entrada…). Vamos, que la gente se acuerde de tu mensaje y no de tu sonrisa. Lucharé por ello, oye.


Por ciervo, hay reuniones tostmasters en Barcelona tanto en castellano como en inglés (ignoro si hay en catalán, pero que no se entere Carod...). Estaría bien un día ir en probar a ver qué opináis. Son gratis, pero tienen preferencia los socios del club y los organizadores. Está tot plegat muy jerarquizado, pero vamos, nada que no tenga, por ejemplo, el CSIC.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Iyóo!!! Gloriosa entrada... se te extrañaba (aunque no es un 'yisas' del buen royo... es simplemente jesú que te dice que só groso, pa'que lo sepas).

Negro.

Anónimo dijo...

No he entendio un pijo, pero supongo que es bueno. Gracias muchas como diría mi querida Andrea Caracavallo

Anónimo dijo...

Yuju

Anónimo dijo...

Releo (si, estoy al pedo, que le vamos a hacer?) y me pregunto... fuiste de nuevo a lo de los Masters of de tostadors? Preguntaste si se consiguen los muñecos? (es que conozco a uno que colecciona los de los Masters del Universo, pero como ya los tiene casi todos no le vendría mal empezar con los de los Masters de las Tostadoras).

Negro

Anónimo dijo...

Pos entoavía no he vuelto a ir. Mi colega está como un poco liado y no se anima. Pero igual la semana que viene vamos, a ver si nos reímos un rato. Ya les preguntaré por los muñecos pingajos esos.